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Este domingo 3 de septiembre a las 17:00 horas en la Parroquia San José, de La Unión, se vivió intensamente la actividad Testigos de una Llamada, ocasión en se recordó el natalicio del siervo de Dios Esteban Gumucio SS.CC.

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La comunidad de la parroquia San José dispuso de todo para recibir a todos los que quisieron dedicar una hora para orar la propia vocación, y celebrar los 103 años del natalicio del padre Esteban Gumucio SS.CC., siervo de Dios, y modelo vocacional en su forma de escuchar, seguir y vivir la invitación que el Señor. La actividad inició las 17:00 horas del pasado domingo 3 de septiembre en la Parroquia San José, en La Unión.

La actividad inicio con una palabras del padre Pedro Pablo Achondo SS.CC., párroco de la Parroquia San José, quien dio la bienvenida y agradeció la presencia de los asistente. A continuación el sacerdote jesuita Cristóbal Fones SJ se dispuso a iniciar la oración, mediante canciones que ayudaban a ora por la propia vocación, explicando la universalidad de la vocación a la vida, la responsabilidad de la vocación a la fe a través del bautismo y el compromiso que se adquiere tras acoger el llamado al amor ya sea por medio de la vida consagrada o a través del matrimonio.

El padre Miguel Ángel Concha SS.CC., párroco de la Parroquia Inmaculada Concepción de Río Bueno, compartió con los participantes su experiencia de encuentro con Cristo, y lo que para el significaba acoger la llamada que un día Dios le hizo como sacerdote y religioso. Sobre esto señalo que la “la estola hay que llevarla bien puesta”, en referencia al cuidado que se debe tener de caer en la tentación de la fama, del orgullo, del poder, entre tantas otras tentaciones que igual afectan a los sacerdotes.

La jornada también dio acogida a la lectura de poemas del padre Esteban Gumucio SS.CC., por parte del padre Pedro Pablo Achondo SS.CC, y a través de las canciones que dieron a conocer el testimonio de este sacerdote y religioso que en su “Si” a Dios, acogió el llamado a entregarse por amor a sus hermanos, especialmente los más vulnerados, juzgados y excluidos.

Testigos de una Llamada

Testigos de una Llamada es una actividad que se realiza mes a mes en distintas parroquias y comunidades de la diócesis de Valdivia. La iniciativa formulada por el jesuita Cristóbal Fones y el padre Nelson Huaiquimil, Vicario General de la diócesis de Valdivia, tiene como objetivo generar un espacio para orar por la vocación propia y darse una oportunidad para encontrarse y conocer testimonios de quienes viven su vocación a la vida, a la fe y al amor en sus comunidades. Esta iniciativa se enmarca en el año en que como diócesis ponemos el acento en el eje temático “Vocaciones y Ministerios” de nuestras orientaciones pastorales.

 

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A las 09:30 horas del 31 de agosto de 2017, el padre Gonzalo Espina, párroco de la Parroquia San Pablo y Director de la Casa de Formación San Lorenzo, asumió el cargo como nuevo Administrador Apostólico sede vacante Valdivia hasta el nombramiento de un nuevo obispo.

A las 09:30 horas la Nunciatura Apostólica Chilena hizo público el nombramiento del padre Gonzalo Espina como Administrador Apostólico de la sede vacante de Valdivia. El presbítero recibió el nombramiento a las puertas de una misa en agradecimiento por los 30 años de Consejo de Secretarias y Secretarios Parroquiales de la diócesis de Valdivia, siendo estos los primeros en recibir un afectuoso saludo por parte del nuevo administrador.

Las lecturas de la celebración referían al buen administrador, por esto en su homilía el padre Gonzalo hablo sobre la responsabilidad con que se tienen que realizar las tareas encomendadas, y como dicho trabajo será bueno si nace desde el amor y se realizan con cariño por nuestros hermanos. Invito a los secretarios a realizar sus labores con mucha ternura, recordando que por medio de ellos es que las personas son recibidas en cada una de las parroquias. Al finalizar la eucaristía el nuevo administrador pidió que orasen por él para realizar adecuadamente la tarea que se la ha encomendado hasta el nombramiento del nuevo obispo.

A continuación el padre Gonzalo Espina desayuno con las secretarias y secretarios parroquiales, celebrando con ellos los 30 años de su comunidad, luego partió rumbo al Obispado de Valdivia donde fue recibido por los funcionarios, quienes le saludaros y felicitaron por su nombramiento.

 

El nuevo Administrador Apostólico de la sede vacante de Valdivia, hizo llegar a todos los presbíteros,diáconos, religiosos, religiosas, consagradas y laicos de la diócesis de Valdivia, una carta mediante la cual les saludo. En dicha carta también saludó a las autoridades, a todos los hermanos de la fe en Cristo y a los hermanos que profesan otras religiones, ideas o creencias. En su carta pidió por el Arzobispo de Antofagasta, monseñor Ignacio Ducasse, e invito a toda la comunidad al dialogo y al encuentro para trabajar junto por el bien común, sobre todo de aquellos más vulnerables.

 

 

 

Carta del Administrador Apostólico de Valdivia

OBISPADO DE VALDIVIA

Valdivia, 31 de agosto de 2017

Estimados hermanos y amigos

La Santa Sede me acaba de nombrar Administrador Apostólico de Valdivia, sede vacante. He aceptado este servicio  en actitud de humildad y obediencia, con la confianza puesta en Dios y en todos ustedes. Se trata de un servicio temporal, a la espera del nombramiento de un nuevo Obispo. Durante  este periodo he de velar por el bien de la Diócesis, respetando el principio canónico “vacante la sede nada debe innovarse”. Esto significa seguir las Orientaciones Pastorales que ya tenemos, acogiendo los impulsos del Espíritu.

Deseo enviar un entrañable saludo a toda la Iglesia que peregrina en Valdivia, Diócesis a la que amo y sirvo de corazón. Un fraternal saludo a mis hermanos presbíteros, a todos los diáconos, religiosos, religiosas y laicos. Intentaré conformarme más a Cristo, Cabeza de la Iglesia, para servir a todos sin distinción y transmitirles la alegría del Evangelio.

A quienes nos une la fe en Jesucristo, un fraternal saludo en el Señor, que nos quiere cada día más unidos. A todos cuantos profesan otra fe, creencia o idea, mi respeto y valoración en el deseo de diálogo y encuentro, en torno a tantos valores que compartimos y en la búsqueda del bien de todos, particularmente de la dignificación de los hermanos más pobres.

A  las autoridades y representantes de todas las instituciones de la sociedad valdiviana, vaya mi reconocimiento y el deseo de recíproca colaboración, en todo cuanto contribuya al bien común, especialmente cuando esté en juego la dignidad humana y el cuidado del medio ambiente.

Un recuerdo entrañable y agradecido para Mons. Ignacio Ducasse Medina, quien ha sido Obispo de Valdivia durante los últimos 15 años y ahora es Arzobispo de Antofagasta.  Para su nueva misión, nuestros mejores deseos y nuestra oración.

La preparación de la visita del Papa Francisco a Chile y la espera de un nuevo Obispo para Valdivia, nos ofrece un tiempo especialmente propicio para seguir creciendo en el protagonismo de todos en la construcción de la Iglesia, desde la vocación y ministerio de cada uno.

Su hermano y servidor

Gonzalo Espina Peruyero

Administrador Apostólico de Valdivia


El movimiento EPE, Encuentro de Padres en el Espíritu, quiere invitar a la comunidad diocesana a celebrar junto a ellos sus 20 años en nuestra diócesis. La celebración tendrá lugar este domingo 13 de agosto, en la misa dominical de la parroquia San Pablo a las 10:30 horas.

Con gran alegría invitan los miembros del movimiento EPE a toda la comunidad diocesana para celebrar juntos estos 20 años de vivir y llevar el encuentro con Cristo a los padres de nuestra diócesis. Para esto invitan a sumarse participando el día 13 de agosto en la misa dominical de la parroquia San Pablo, y con la oración.

Encuentro de Padres en el Espíritu es una experiencia que forma parte de la gran familia de Comunidades Cristianas de encuentros en el Espíritu, como lo son ENE, ELE, EJE, ESCOGE y EME. Mediante el itinerario de vida comunitaria, formativa y apostólica de EPE, los papás logran desarrollar los valores y capacidades humanas y cristianas necesarias que les permiten: Ayudar a sus familias a permanecer fieles a su fundamente que es el matrimonio, transformándose en Iglesias Domesticas; Conservar la identidad de sus familias en cuanto “comunidades intimas de amor y de vida”, reflejo de la vida de comunión que existe en la Santísima Trinidad; y finalmente lograr la misión específica de sus familias al servicio de la vida, de la comunidad y del Reino.


Diseñado y administrado Juan Latorre.