Los Decanatos

¿Qué son?
Es una “reunión de parroquias vecinas”, una forma estable de colaboración entre parroquias donde todos los agentes pastorales –pastores, diáconos, religiosos (as) y laicos- son responsables de la comunión y participación eclesial. Es, por lo tanto, un instrumento pastoral para la conjunción de fuerzas apostólicas en las que resulte potenciada la eficacia de las mismas parroquias.
¿Cuál es su fin?
Nombro sólo algunas: A la luz de las Orientaciones Pastorales Diocesanas, definir criterios pastorales comunes para la evangelización del sector que le corresponde al Decanato así como evaluar la aplicación de las mismas; promover, coordinar y facilitar la pastoral orgánica de acuerdo al Plan Pastoral diocesano; desarrollar el sentido comunitario fomentando y programando encuentros periódicos entre los sacerdotes del Decanato, entre éstos y los demás agentes pastorales; promover la formación de los agentes pastorales.
¿Cómo funciona?
Cada Decanato funciona al menos en tres instancias complementarias que son: encuentro decanal de sacerdotes que es bimensual; encuentro de Diáconos Permanentes según calendario; Encuentros formativos según Áreas Pastorales; Encuentros del Equipo de Coordinación Decanal (una suerte de Comité Ejecutivo que apoya al decano); El Consejo Decanal compuesto por los representantes de todas las dimensiones pastorales del Decanato que se reúne 03 veces al año. Al frente de todas estas instancias se encuentra el DECANO, sacerdote que ha sido elegido por los sacerdotes y diáconos del Decanato por un periodo de 03 años.
¿Quiénes lo componen?
En la Diócesis de Valdivia hay dos Decanatos:

  1. Decanato San Antonio Abad, que comprende todas las instancias pastorales de la ciudad de Valdivia y Corral.
  2. Decanato San José, que comprende todas las instancias pastorales de Paillaco, Los Lagos, Río Bueno, La Unión, Futrono, Lago Ranco y Reumén.

El Decanato San Antonio Abad ha discernido y se ha comprometido para el año 2017-2018 cuatro desafíos:

1. Ocuparnos de los adultos mayores vulnerables creando donde no haya, una línea de acción pastoral que se ocupe de ellos.

2. En la dinámica misionera, hacer un esfuerzo por tener más presencia, y que ésta sea significativa, en los sectores nuevos de la ciudad de Valdivia.

3. Cuidar los espacios de participación de los jóvenes, adolescentes y niños.

4. Mejorar nuestras relaciones fraternas, en la conciencia de que somos ante todo hermanos, con el gozo de haber sido llamados por el Señor a vivir la fe en comunidad.


Diseñado y administrado Juan Latorre.