Mediante la oficina de la Pastoral se pretende crear y fortalecer los lazos y cercanía entre la comunidad local y quienes se integran a ella provenientes de otros países
El pasado martes 3 de julio, en nuestro obispado, se dio lectura al decreto que erige una nueva instancia de evangelización, la Pastoral Migratoria, con objeto contribuir, a la luz del Evangelio y del Mensaje de la Iglesia, en la construcción de una sociedad más justa, fraterna y solidaria que respete a los migrantes, refugiados y desplazados como signo y fermento del Reino de Dios.
A la inauguración asistieron el Intendente de Los Ríos, sr. César Asenjo; la srta. Bárbara Santa María, Encargada de Extranjería de la Gobernación Provincia de Valdivia; sr. Camilo Jiménez en representación de la Seremía de la Mujer y Equidad de Género; sr. Guillermo Palacios, de la ONG Migrantes en Los Ríos; Pier Medor y Valeria Salazar, de la Consultora VyP; Srta. Victoria Baeza, de la ONG Techo; junto con amigos inmigrantes; miembros de nuestra iglesia diocesana; voluntarios y benefactores.
El encargado de bendecir la nueva oficina fue nuestro Administrador Apostólico, R.P. Gonzalo Espina, la cual está abierta desde hoy lunes 9 de julio, ofreciendo atención de lunes a viernes entre la 9:00 y las 12:00 hrs, buscando siempre actuar en base a los cuatro verbos propuestos por el Papa Francisco: “Acoger, Proteger, Promover e Integrar”.
“Esta nueva pastoral perfila su identidad y naturaleza, erigiéndose como la conciencia social que urgirá a nuestras comunidades a ser una Iglesia de brazos abiertos, centinela de la esperanza y promotora de justicia, ante la dura realidad que viven tantos hermanos inmigrantes en Valdivia” estipulan desde la página de la Pastoral Social de nuestra diócesis.
Así también, desde la misma Área Social y la nueva Pastoral Migrante, entregan sus agradecimientos “a todos los que han colaborado en la concreción de este proyecto, y a los que se sumen y continúen entregando su servicio y ayuda para tantos hermanos con quienes podemos compartir el viaje”.
El pasado 3 de junio, en la solemnidad de Corpus Christi, comenzó el camino de Cristo Eucaristía que irá al encuentro de las comunidades de la diócesis. Esta peregrinación se enmarca en el Congreso Eucarístico, y se ofrece como un tiempo especial para adorar a Cristo.
Al mediodía en la Catedral, el padre Gonzalo Espina Peruyero, Administrador Apostólico sede Vacante, presidió la Eucaristía en la que fue bendecida la Custodia peregrina. Representantes de la Diócesis, agentes pastorales de EME, EPE y del Instituto Inmaculada Concepción ingresaron junto a los diáconos permanentes y al sacerdote en la procesión de entrada, signo del Pueblo de Dios que peregrina al encuentro de Cristo Vivo.
Durante la homilía, el padre Gonzalo destacó la alianza eterna de Jesús con su pueblo que renueva su Amor quedándose en la Eucaristía, “El nos da un mensaje ‘cuenta conmigo para siempre, incondicionalmente’, y lo hace quedándose en la Eucaristía ‘tomen y coman este es mi cuerpo; tomen y beban esta es mi sangre’, es decir ‘tomen mi persona; soy Yo el que me dono a ustedes’. De manera que toda la vida cristiana tiene como centro la Eucaristía, y desde ahí somos invitados a ser y a vivir agradecidos ‘por todo el bien que nos ha hecho’ al ser ese don mismo de Dios que en su Hijo se dona a nosotros por Amor… Quien está agradecido, vive eucarísticamente ofreciendo su propia vida al servicio de los demás porque no hay alegría mayor que darse por amor. No hay mayor gozo que experimentar que mi propia vida da vida a otros; ello emana del encuentro con Cristo en la Eucaristía. Ojalá que esta Solemnidad en la que bendecimos la Custodia peregrina, que va a recorrer todas las parroquias y comunidades de nuestra Diócesis, nos ayude como Pueblo de Dios a crecer en amor a Cristo, a ponerlo al centro como Camino, Verdad y Vida que es, para así fructificar en El y ser signos del Reino a toda la humanidad, en especial a los más pobres y desposeídos”, concluyó.
Tras la homilía fue presentada la custodia a los fieles y elevando la oración al Cielo, quedó bendecida, lista para portar a Cristo Eucaristía que será adorado recorriendo las diversas parroquias y comunidades de la Diócesis.
Tras la Comunión, los fieles reunidos en la Iglesia Catedral vivieron un instante profundo de Adoración al Santísimo Sacramento unidos a Iglesia chilena y a cada rincón de la diócesis de Valdivia. Tras la Adoración, y tras recibir la bendición con el Santísimo, Jesús Sacramentado salió en procesión, junto a los Agentes Pastorales, bendiciendo a su paso a todo el Pueblo Fiel de Dios.
Tras la Bendición, la custodia permanecerá toda esta semana en la Capilla del Sagrario del Templo Catedral donde habrá Adoración de 11 a 12 hrs., previo a la Eucaristía; recorrerá sectores aledaños al sector parroquial, entre ellos la Universidad Austral de Chile y, como era de esperar, el 8 de Junio saldrá de la Parroquia Nuestra Señora del Rosario recorriendo los ríos del Calle-Calle con la travesía desde Niebla al Puerto de Corral donde le esperarán los fieles de la Parroquia Nuestra Señora del Tránsito, para retornar el 14 de Junio nuevamente a Niebla y llegar el 20 a la Parroquia Santa Inés desde donde llegará al Instituto Inmaculada Concepción, el 26, para seguir peregrinando por los Decanatos San Antonio en Valdivia y San José con sus Parroquias y Comunidades urbanas y rurales.
Fuente: Comisión de Comunicaciones del Congreso Eucarístico Diocesano
La tradicional oración ecuménica reúne distintos credos cristianos presentes en nuestra ciudad desde hace varios años.
“Juntos acogemos al hermano migrante” es el lema que llevó este año la oración ecuménica que tradicionalmente se realiza en Valdivia. Así lo decidieron en la reunión de pastores, según relató el padre Gonzalo Espina, administrador apostólico de nuestra diócesis.
La tradicional oración que se realizó el miércoles 23 de la semana pasada en la iglesia Luterana de Valdivia el pasado miércoles a las 19:30 horas, reunió a los pastores de las iglesias luterana, anglicana y católica de nuestra ciudad, para orar unidos al mismo Dios en que todos creemos.
“Esta oración es una deuda y un desafío que tenemos. Es propio de la presencia del Espíritu crear comunión y unidad” declaró el padre Gonzalo sobre este encuentro ecuménico.
En la oración cada pastor preparo un mensaje a partir de la lectura elegida en esta ocasión, Mateo 25, 35. El pastor Ricardo Villaroel, de la Iglesia Anglicana, presento una recorrido desde el Antiguo Testamento, señalando todos aquellos pasajes que ya nos hablan del trato que debemos dar a los hermanos migrantes. A continuación el padre Gonzalo Espina, Administrador Apostólico de Valdivia, realizó un recorrido desde las cifras mundiales sobre migración, aproximándose a la experiencia nacional, local y personal, señalando el ser migrantes de cada uno de nosotros y la importancia de la buena compañía en este viaje de cada uno. Finalmente el pastor de la Iglesia Luterana, Hemir Ochoa, señalo la importancia de volver a los caminos, a vivir la experiencia de discípulos misioneros, que actúan no por premios en el Cielo, sino ante la injusticia que a todo cristiano le exige, a la manera de Jesús, tornar en justicia.
Hay que señalar que esta Oración Ecuménica es la primera en que participa nuestro Administrador Apostólico, r.p. Gonzalo Espina, quien en sus palabras señaló, sentirse profundamente identificado con el Salmo 133: “Que bueno, que alegría, estar los hermanos unidos”. En su intervención, nuestro pastor, señaló la importancia de abordar la situación de aquellos migrantes vulnerados, como un propósito conjunto de los pastores participes de la oración, generando un “ecumenismo de la caridad, de la misericordia”.
El diacono de la Iglesia Católica de Valdivia, don Wladimir Steffen, encargado de ecumenismo de nuestra diócesis, finalizó este encuentro invitando a participar del primer encuentro ecuménico de música cristiana en Valdivia. Esta actividad que se propone como un segundo encuentro ecuménico en torno a la oración a Dios por medio de la música, se programa para este 30 de junio, en el templo Luterano de Valdivia.
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