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La diócesis de Valdivia invita a la Eucaristía que se organiza para agradecer la vida, servicio y ministerio del que fuera su Administrador Apostólico en dos periodos.

Este martes 15 de enero a las 19:30 horas en el templo Catedral de Valdivia, se realizará una Eucaristía por medio de la cual se quiere dar gracias a Dios por la vida y por el ministerio de monseñor Sergio Contreras. Por ello invitamos a la comunidad católica, parroquias, colegios, movimientos, y a todas aquellas personas que conocieron al ex obispo emérito de Temuco.

Monseñor Contreras fue Administrador Apostólico de nuestra diócesis en dos oportunidades, en 1996 y posteriormente entre 2001 y 2002. Por primera vez tras la partida de monseñor Alejandro Jiménez y antes de la llegada monseñor Ricardo Ezzati. Luego volvió para acompañar a nuestra comunidad diocesana tras la partida de monseñor Ezzati y antes de la llegada monseñor Ignacio Ducasse. Su gestión como administrador en nuestra diócesis se destaca por el profundo trabajo pastoral y acompañamiento que realizó en nuestra Iglesia diocesana.

Monseñor Sergio Contreras Navia

Nació en Valparaíso el 27 de abril de 1926, hijo de Manuel Contreras y Carmen Navia. Cursó estudios universitarios, titulándose de ingeniero mecánico por la Universidad Técnica Federico Santa María, donde egreso en 1950, con su memoria “Bombas axales de paletas”, que le significo ser distinguido por el Colegio de Ingenieros de la época, por el mejor trabajo de título en ingeniera.

Luego estudió en el Seminario de Santiago y en la Facultad de Teología de la Universidad Católica de Chile, siendo ordenado sacerdote en 1957. Tras un servicio de 20 años como presbítero, monseñor Contreras es ordenado obispo, y luego un 28 de diciembre de 1977, es trasladado a la diócesis de Temuco en reemplazo de monseñor Bernardino Piñera, para asumir como pastor.

El comunicado de la diócesis de Temuco señala, que, como pastor, monseñor Contreras, “impulsó el apostolado de los laicos y la promoción humana y cristiana de los más desposeídos. Se preocupó de los derechos humanos, manteniendo un comité de solidaridad". Por otro lado, "fue requerido por comunidades mapuches para mediar en distintas situaciones y el 21 de octubre de 2001, cuando visitó la Intendencia de la Novena Región para despedirse de las autoridades de Gobierno, ya que dejaba el cargo el 3 de noviembre, indicó que el tema indígena fue una de las materias más importantes de su gestión y en ese entonces destacó que aún quedaba mucho por hacer, por no ser un problema que se solucionaría en el corto plazo”, agrega el comunicado.

Monseñor Contreras fue uno de los formadores de la Vicaría de la Solidaridad en Temuco; apoyó la creación de la Fundación Instituto Indígena, así como variadas organizaciones de defensa de los derechos humanos del pueblo mapuche. Estas acciones marcaron su ministerio, un ministerio de servicio y compromiso activo con la Iglesia de los pobres y de los perseguidos.


La comunidad se une en oración por la pascua del que fuera su administrador apostólico en dos periodos.

El reverendo padre Gonzalo Espina Peruyero, en compañía de clero y laicos de la diócesis de Valdivia, participaron de la Santa Misa realizada este lunes 7 de enero en la ciudad de Temuco para acompañar a monseñor Sergio Contreras. Monseñor Contreras, obispo emérito de Temuco, falleció a sus 91 años en la víspera de la solemnidad de Epifanía, el pasado sábado 5 de enero de 2018 a las 19:00 horas.

Monseñor Sergio Contreras fue un pastor que dejo una huella en nuestra diócesis, al ser su administrador apostólico en dos periodos, primero en 1996 y luego entre el 2001 y 2002. Su calidez, su cercanía y su gran dedicación le hicieron ganarse el cariño de la iglesia local, la que se une en oración por su eterno descanso y agradece al Señor, por el ministerio de trabajador por el Reino, artesano de justicia y de paz.

Monseñor Sergio Contreras Navia

Nació en Valparaíso el 27 de abril de 1926, hijo de Manuel Contreras y Carmen Navia. Cursó estudios universitarios, titulándose de ingeniero mecánico por la Universidad Técnica Federico Santa María, donde egreso en 1950, con su memoria “Bombas axales de paletas”, que le significo ser distinguido por el Colegio de Ingenieros de la época, por el mejor trabajo de título en ingeniera.

Luego estudió en el Seminario de Santiago y en la Facultad de Teología de la Universidad Católica de Chile, siendo ordenado sacerdote en 1957. Tras un servicio de 20 años como presbítero, monseñor Contreras es ordenado obispo, y luego un 28 de diciembre de 1977, es trasladado a la diócesis de Temuco en reemplazo de monseñor Bernardino Piñera, para asumir como pastor.

El comunicado de la diócesis de Temuco señala, que, como pastor, monseñor Contreras, “impulsó el apostolado de los laicos y la promoción humana y cristiana de los más desposeídos. Se preocupó de los derechos humanos, manteniendo un comité de solidaridad". Por otro lado, "fue requerido por comunidades mapuches para mediar en distintas situaciones y el 21 de octubre de 2001, cuando visitó la Intendencia de la Novena Región para despedirse de las autoridades de Gobierno, ya que dejaba el cargo el 3 de noviembre, indicó que el tema indígena fue una de las materias más importantes de su gestión y en ese entonces destacó que aún quedaba mucho por hacer, por no ser un problema que se solucionaría en el corto plazo”, agrega el comunicado.

Monseñor Contreras fue uno de los formadores de la Vicaría de la Solidaridad en Temuco; apoyó la creación de la Fundación Instituto Indígena, así como variadas organizaciones de defensa de los derechos humanos del pueblo mapuche. Estas acciones marcaron su ministerio, un ministerio de servicio y compromiso activo con la Iglesia de los pobres y de los perseguidos.
Este lunes 7 de enero a las 11:00 horas se realizó la misa para agradecer la vida de monseñor Sergio Contreras, quien su comunidad homenajeo como “signo del amor de Dios”, quien, parafraseando a san Pablo, dio la buena batalla hasta sus 91 años.


Las parroquias del decanato San Antonio Abad, de Valdivia, se reunieron para realizar la tradicional procesión en la Solemnidad de la Inmaculada Concepción, cuyo protagonismo fue para Cristo Sacramentado

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El pasado 8 de diciembre a las 16:30 horas estaban citadas todas las parroquias y comunidades del decanato San Antonio Abad. Un cielo cuyas nubes grises amenazaban lluvia no fue obstáculo para que en calle Condell con Avenida Arturo Pratt se fuesen reuniendo los más de mil fieles que caminaron junto a la imagen de María, acompañando a Cristo, en su presencia del Santísimo Sacramento.

A las 17:00 horas comenzó la procesión que recorrió la costanera y el centro de Valdivia hasta nuestro templo Catedral. Las gotas que caían encendían los cantos y la alegría de quienes con la certeza de hijos amados recorrían las venas y el corazón de la ciudad. Los Cuasimodistas del Arenal acompañaban la imagen de María sobre una hermosa calesa decorada para tal ocasión. Sin embargo, el principal protagonista, Jesucristo, iba acompañado por laicos y laicas, un Jesús que, en su presencia como Santísimo Sacramento, caminó junto a sus hermanos y hermanas.

Al llegar a la Plaza de la Republica, los caminantes se fueron concentrando frente a nuestro templo Catedral. Allí tuvo lugar una cercana celebración litúrgica, en la que nuestro Administrador Apostólico, reverendo padre Gonzalo Espina, señalo entre otras cosas, que “María, Madre de Jesús, porque escuchó y cumplió la Palabra, se convirtió, no ya en custodia hecha de metal o de madera, sino en custodia de carne, en custodia viviente. Es la María del “Sí”, del “hágase”, del “Amén”, que de Jesús desde su vientre hasta tenerlo en sus brazos al bajarlo de la Cruz. Allí recibió el encargo de cuidarnos a nosotros.”

A continuación, las comunidades hicieron ingreso a la Catedral de Valdivia, donde se vivió un profundo momento de Adoración al Santísimo. Al finalizar, se entregó la bendición sacramental.

Congreso Eucarístico

Este año 2018 la Iglesia chilena y nuestra Iglesia diocesana vivió el Congreso Eucarístico bajo la pregunta “¿Qué haría Cristo en mi lugar?”. Como diócesis de Valdivia terminamos el pasado 10 de noviembre en la parroquia San José, de La Unión, este tiempo de gracia en el decanato San José. Allí las comunidades de Paillaco, Los Lagos, Río Bueno, La Unión, Lago Ranco y Futrono pudieron comenzar la cosecha de los frutos de este año.

El decanato San Antonio Abad eligió como fecha de término, el 8 de diciembre en la Solemnidad de la Inmaculada Concepción. Con esta celebración toda la diócesis de Valdivia comienza a discernir y a agradecer todos aquellos frutos que deja en nuestra comunidad diocesana el Congreso Eucarístico 2018.

 

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